(Alemania) Campaña Switch Off! Reivindicación de atentado incendiario contra Armin Papperger

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Incendio contra Armin Papperger – Switch Off Rheinmetall

«Con el cambio de época y la guerra en Europa, también ha comenzado una nueva era para Rheinmetall».
(Armin Papperger en la presentación del informe anual de la empresa para 2023)

En la noche del 28 al 29 de abril de 2024, prendimos fuego al cobertizo del jardín de la propiedad de Armin Papperger en Hermannsburg [antes Südheide], en la esquina de Turnerstrasse e Immenhoop. Papperger es el jefe de Rheinmetall, uno de los principales actores de la industria armamentística alemana.

Papperger se siente como en casa en Südheide. Está rodeado de campos de entrenamiento militar y no muy lejos del centro de entrenamiento de combate GÜZ-Altmark [el mayor campo militar de Europa para técnicas de contrainsurgencia urbana para países de la OTAN]. La planta de Rheinmetall en Unterlüß también está a pocos pasos. Fue aquí donde miles de trabajadores forzados perdieron la vida al servicio de la economía de guerra alemana en la planta de Rheinmetall-Borsig. Esta es la región donde muchos nazis encontraron refugio después de la guerra, entre ellos Adolf Eichmann y Herbert Kappler, el asesino de las fosas ardeatinas [en marzo de 1944, cerca de Roma]. Esta es la zona donde, en los años ochenta y noventa, los neonazis celebraban regularmente sus entrenamientos deportivos de combate. No lejos de la casa de Papperger se encuentra Munster, uno de los mayores estadios del ejército alemán. En este entorno, se siente seguro y bien rodeado, incluso por los amigos con los que este cazador aficionado sale de vez en cuando a merodear. Pero probablemente la noche pasada le hizo darse cuenta de que no tenía unos cuantos amigos cualquiera, y de que su lugar de retiro no era seguro.

Rheinmetall es uno de los grandes beneficiarios de este llamado cambio de era. Algunas cifras lo dejan claro: desde 2022, la cotización de las acciones de Rheinmetall se ha multiplicado por cinco; el propio Papperger ha añadido varias veces acciones de Rheinmetall a su cartera personal de acciones. En 2023, el grupo, que entró en el índice bursátil DAX, aumentó su facturación a 7.200 millones de euros, y aspira a alcanzar los 10.000 millones de euros en 2024. Antes de febrero de 2022, la producción de proyectiles de artillería era de 70.000 al año, pasando a 350.000 en 2023, y debería alcanzar los 700.000 en 2024. Tras la adquisición de la empresa española de municiones Expal, Rheinmetall se considera el mayor fabricante mundial de munición de artillería. El Canciller alemán Olaf Scholz, el embajador ucraniano y el Ministro de Defensa Boris Pistorius («Alemania debe estar preparada para la guerra») asistieron personalmente a la ceremonia de colocación de la primera piedra de la nueva fábrica de Unterlüß. Se espera que la nueva fábrica produzca 200.000 granadas al año.

Papperger es uno de los ejecutivos del sector armamentístico cuya presencia en los medios de comunicación es especialmente importante. Los días en que la industria armamentística adolecía de una imagen sulfurosa han pasado a la historia. En marzo de 2024, el vicecanciller Robert Habeck dijo en una reunión de los 20 principales fabricantes de armas de Alemania: «¡Necesitamos esta industria! Ahora las máquinas de matar pueden presentarse y promocionarse con confianza y agresividad. Y, por supuesto, Rheinmetall tiene otros productos que ofrecer además de munición, incluidos los tanques: los tanques Lynx y Puma, el tanque Boxer y el tanque antiaéreo Skyranger. En cuanto al tanque Leopard [buque insignia de la industria armamentística alemana], Rheinmetall fabrica el cañón. Además, Rheinmetall almacena varios tipos de tanques antiguos que se han vendido a Ucrania con su munición, obteniendo un beneficio considerable. La empresa también suministra piezas para el avión de combate estadounidense F35.

Rheinmetall no sólo planifica, produce y mata en casa. En todo el mundo, el grupo emplea a más de 30.000 trabajadores en 28 países. Está prevista una nueva planta de producción de municiones en Ucrania, así como una planta de mantenimiento de tanques en el verano de 2024. También está prevista la producción de carros de combate y carros de asalto. También está prevista una planta de artillería en los países bálticos, y Rheinmetall está desarrollando con Hungría un tipo de carro de combate completamente nuevo. En Estados Unidos, Rheinmetall participa en licitaciones del ejército estadounidense y está a punto de conseguir un contrato de 45.000 millones de dólares para el sucesor del vehículo blindado de combate de infantería Bradley. La conquista del mercado ruso ya no es actualidad. Pero en 2011, Rheinmetall firmó un contrato con el gobierno ruso para suministrar un centro de entrenamiento para el ejército ruso, y se le otorgó el papel de pionero y abridor de puertas.

El llamado cambio de época no sólo significa armamento gigantesco y nuevos beneficios récord para la industria armamentística. También significa alinear a toda la sociedad con el ejército y la guerra. Políticos de casi todos los partidos compiten entre sí para presentar propuestas. Reintroducción del servicio militar obligatorio, formación militar en las escuelas, vínculos entre la investigación y el ejército, etc.

Es evidente que los ejércitos y la industria armamentística son los mayores destructores del medio ambiente, que engullen cantidades gigantescas de recursos y que, por supuesto, también son los mayores productores de gases de efecto invernadero.

La lucha contra la destrucción del clima es también la lucha contra la guerra, el ejército y la industria armamentística.
La guerra empieza aquí, ¡detengámosla aquí!
¡Apaguemos el sistema de destrucción!
¡Libertad para Daniela!

¡Fuerza y suerte a todxs lxs de la izquierda radical en la clandestinidad, y a todxs lxs que se autoorganizan para atacar las estructuras de dominación!