Extraído de La Zarzamora
El 20 de abril de 1985, el Frente de Liberación Animal rescataba desde la Universidad de California a 700 animales secuestrados para la experimentación científica, entre ellos se encontraba el pequeño Britshes, un bebé mono nacido en cautiverio que sufrió las más aberrantes torturas a nombre de la ciencia. En la actualidad cada año más de 100.000 primates son utilizados para la experimentación científica, y lejos de lo que pensaríamos a 39 años de las torturas a Britches, acabamos de vivir uno de los períodos más terribles para ellos, la «búsqueda de la vacuna para el covid».
LA HISTORIA DE BRITCHES
Britches nació en la universidad de California (EEUU), recién nacido fue separado de su mamá al igual que otros 24 monos bebés, a quienes les cocieron los párpados para un estudio psicológico de privación sensorial. A Britshes además le colocaron un dispositivo electrónico de ultrasonido amarrado en la cabeza, que repetía sin parar una horrible grabación¹. Lo mantenían en una jaula sin atención alguna, en donde vivía aferrado a un cilindro metálico.
La duración de este abominable experimento era de 3 años, posteriormente asesinarían a Britshes para estudiar su cerebro abierto. Sin embargo, aquel 20 de abril de 1985, el ALF impidió la continuidad de aquel terrible plan de muerte, irrumpiendo en las dependencias del laboratorio, rescatando a Britshes y a otros 700 animales, entre los cuales habían ratones, gatos, zarigüeyas, palomas, conejos y monos, brutalmente lastimados por las torturas de la vivisección. De igual manera, se aseguraron de provocar una pérdida económica de 7000 dólares a la nefasta institución.
Tras el rescate, Britches estuvo al cuidado de veterinarios de confianza del ALF. Se mantuvo en rehabilitación con cuidados y cariño para sanar sus espasmos musculares, neurosis y el estrés, provocado por los repudiables científicos. Con el tiempo incluso sanó su ceguera artificial. Según relata el Frente de Liberacion Animal (ALF), a las pocas semanas se vieron notables mejoras, el pequeño Britshes jugaba y vivía su niñez. De esta manera, ya estaba listo para ser trasladado a un santuario de México, lugar al que finalmente llegó, en donde fue adoptado por una Mona que lo recibió como su hijx.
EL COVID: NUEVO AUGE DE LA EXPERIMENTACIÓN ANIMAL
Durante la llamada pandemia se utilizaron miles de primates en el proceso de la creación de vacunas, lo que provocó una alta demanda que incluso generó una escasez de estos, incrementando su precio, el tráfico y el macabro negocio de la explotación animal.
La experimentación con Macacos rhesus y de Mamacos de cola larga, para crear las vacunas contra el Covid, se incrementó deliberadamente debido a que estos son especies que tienen un gran parecido en su secuencia de ADN con la secuencia humana².
Laboratorios como SinoVac y farmacéuticas como Moderna y Jhonson & Jhonson, utilizaron macacos proporcionados por empresas como Bioqual, una de las tantas empresas dedicadas a la reproducción y distribución de primates para la experimentación científica.
Hasta el 2021, sólo Estados Unidos mantienía 25.000 monos en cautiverio repartidos en siete centros de primates con este objetivo, la mayoría eran Macacos Rhesus de cara rosada. Según cifras basadas en datos de los «Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades» de EEUU³, sólo en el 2019, China le suministró 33.818 primates a ese país, más del 60% del total y en su mayoría fueron Macacos Cynomolgus.
La desbordada demanda de primates por parte de los laboratorios para la llamada «pandemia», incluso provocó que se empezara a promover la creación de una «Reserva Estratégica de monos» para fines científicos en EEUU, la que proveería miles de primates a los laboratorios para este fin.
Los macacos estab siendoncontagiados a la fuerza y expuestos a miles de pruebas experimentales, según aseguran los mismos científicos involucrados en la búsqueda de la vacuna del covid, una vez que los macacos son infectados, ya no pueden ser regresados con sus pares sanos, por lo que el siguiente paso es ser sacrificados.
En Camarles, Tarragona (Europa) se encuentra «Camarney«, uno de los mayores centros de distribución y experimentación con primates no humanos del mundo y el más grande de Europa. Por él han pasado más de 30.000 macacos de cola larga (en peligro de extinción) importados principalmente de Mauricio y Vietnam. Sólo durante el 2022 y la primera mitad de 2023, Camarney importó 4.898 macacos desde esos territorios y exportó 3.651 a Francia, Reino Unido, Holanda y Alemania.⁴
Países como China, Camboya, Indonesia, Mauricio e incluso Perú, se han convertido en los principales proveedores de primates con estos nefastos fines, devastando sus propios ecosistemas.
LOS CASOS MÁS CERCANOS
Sin ir más lejos, en Colombia existen el Centro de Investigación Científica Caucaseco y la Fundación Centro de Primates, entidades que actualmente se dedican a la experimentación para la búsqueda de la vacuna contra la malaria. Ambas fueron multadas en enero de este año por «no contar con los permisos de estudio con fines de investigación científica… ni con los permisos para la caza de los monos con los que experimentaban y que se encontraban en malas condiciones» según expusieron los decomisadores de 133 primates que se encontraban en cautiverio.
Ya en el 2021 se había denunciado la terrible condición de los primates quienes se encontraban con: «parásitos, alteraciones en el hemograma y bioquímicas sanguíneas, asociadas al estrés y deshidratación. Además de amputaciones, fracturas antiguas y lesiones cutáneas de algunas falanges (dedos), presencia de sarro, desgaste, fracturas y ausencia de piezas en la dentadura, así como lesiones cutáneas en labios. En uno de los individuos se registró la ausencia de globo ocular».⁵
El 40% de los primates endémicos de Abya Yala se encuentra amenazado. Cerca de 217 especies y subespecies de monos que habitan en la región se encuentran en peligro. La deforestación, caza ilegal, especies invasoras y enfermedades virales ponen en riesgo su sobrevivencia.
El 7 de noviembre del 2023 en Argentina, se cerró el último centro de experimentación con primates ubicado en el hospital de alta complejidad del Centro de Educación Médica e Investigaciones Clínicas (Cemic), los cuales serían trasladados a refugios al aire libre tras una vida entera de cautiverio y torturas.
ANTIESPECISMO CONTRA LA CIVILIZACIÓN ESPECISTA
La terrible y traumática experiencia de Britches, a la cual podemos hoy acceder con detalles gracias a la acción del ALF, nos hace cuestionar el presente. ¿Qué hicimos por evitar la multiplicación de miles de Britches durante la pandemia?, ¿fuimos parte de esa cadena de explotación y tortura? ¿Sabemos lo que sigue sucediendo con esos primates? ¿Tiene esto relación con el actual auge del tráfico de primates?… Son infinitas las preguntas que surgen de esta realidad, pero más que preguntas nos deja una sensación de frustración, de la cual sólo podemos salir con la acción.
No basta con hablar de maltrato animal o veganismo, enfrentamos a una civilización basada en el especismo y la dominación, por tanto el maltrato, la explotación y asesinato de animales, son expresiones de un paradigma que rige el todo el funcionamiento social, esto también incluye a la medicina formal y las farmacéuticas.
¿Hasta qué punto queremos salvar nuestras vidas? ¿Las de los miles de primates asesinados valen menos que las nuestras?
Mientras la especie suprematista humana luchaba por no contagiarse de covid, obligaba al contagio a miles de primates en los laboratorios de las potencias farmacéuticas. Mientras la humanidad era relegada a sus casas, millones de primates fueron secuestrados y traficados para suplir la gran demanda de cuerpos para experimentar y crear una supuesta cura, que jamás resultó.
Hoy recordamos esta acción, porque los animales viven un exterminio que no solo parará con nuestros cambios individuales sino también con acciones, sabotajes, rescates y todo ataque a las estructuras del especismo.
«En los oídos de estos monstruos que sólo conocen el lucro y la sangre, que se esconden tras leyes injustas, nuestro aliento ha sido desperdiciado. La justicia para las víctimas de la vivisección se logrará no con boicots ni protestas, sino con nuestros mazos en las puertas de los laboratorios».-ALF
A 39 años de la liberación de Britches…
Notas:
¹ Se puede escuchar en la película «Behind The Mask» de Shannon Kieth sobre el ALF.
² https://www.bbc.com/mundo/noticias-52554469
³ https://www.nytimes.com/es/2021/02/28/espanol/monos-laboratorio-covid.html