Palabras leídas durante la actividad «Siempre Hemos Estado» en el marco de las Veladas Centenarias, por los 100 años del Club Social y Deportivo Colo-Colo, el día sábado 28 de junio, en el Espacio de Memoria Irán #3037 (Ex Venda-Sexy, centro de detención y tortura durante la dictadura militar).
Alguna vez escuché que la vida íntima no se tenía que mezclar con la política, o sea que dentro de lo ideal lo que hiciéramos de forma individual y/o colectiva por destruir a la hegemonía del poder tendría que quedar apartado de nuestras relaciones con los seres que amamos, como podría ser nuestrxs padres, amantes, hijxs, etc. A medida que pasan los años, este tipo de afirmaciones cada vez me parecen más alejados de mi realidad y de la forma en la que entiendo y pretendo llevar la política.
No veo otra forma de construir y entender el quehacer político si no es con la necesaria y nutritiva mezcla de todas las aristas que confluyen el desarrollo de cada individuo.
En este sentido, mezclando la vida íntima con «la política», ¿que podría ser más íntimo que el dolor ante la pérdida de alguien que salio de tus entrañas?, ¿podría existir un dolor más grande que ese? Ese dolor, quizás indescriptible para quienes no lo hemos vivido, Luisa Toledo lo sufrió en cada uno de los asesinatos de sus tres hijos, y llevó en su corazón hasta su último latir.
Ese inmenso dolor se transformó en el amor que logró forjar algunos de los cimientos para que muchxs se levantaran en contra de quienes se enriquecen a costa de la perpetuación del dominio.
Por esto, entre muchas otras cosas, Luisa Toledo es la madre resiliente de Rafael, Pablo y Eduardo, y además es la compañera de decenas de manifestaciones, es la voz firme y apasionada capaz de entregar un claro mensaje en contra de lxs poderosxs, es quien se levantaba solidarizando con los presxs… Luisa Toledo fue, y siempre será parte de la construcción de toda una o varias generaciones de jóvenes combatientes.
Con estas palabras aprovecho de enviar un afectuoso saludo a la familia vergara toledo.
Mónica Caballero S.
presa anarquista
invierno 2025