No podemos partir este desahogo sin antes agradecer y abrazar cada gesto solidario que se ha tenido con nosotrxs desde el primer día que pisamos este maldito cementerio de vivxs. Cada acción, cada incendio, cada liberación, cada propaganda, cada aporte; ha sido un soplo de aire fresco en este frenético y repetitivo cotidiano.
Se cumplieron 2 años de aquel hermoso fuego que iluminó la ciudad, como si se tratase de un haz de luz que barre por un bello instante, toda la podredumbre que significan estas decadentes y miserables fiestas por el nacimiento de la organización empresarial de terratenientes y demagogos sedientos de poder. Llamada $hile.
En estas fechas, es que más que nunca respiramos el orgullo de las decisiones que han escrito los caminos de nuestras vidas y de nuestros últimos 2 años. Ya que esta temporada en prisión a significado un costo en lo emocional y personal; en vista del daño colateral que reciben nuestras familias, vínculos y proyectos. Pero aún así, sin duda alguna, no hay ni una gota de arrepentimiento de parte de nosotros. Porque hemos visto a lo largo de la historia como un acto de algarabía, desde el más sencillo al más altisonante, contagia y remece la normalidad con su bella expansión colorida y amenazante. Y esta acción no fue la excepción. En estos dos años hemos visto múltiples réplicas a nuestra acción, donde sus razones escritas muchas veces incluyen el buscar mandarnos afecto, calor y compañía como presxs del caso susaron.
De estas réplicas, las que más nos cautivan sin duda, son las que implican un sacrificio que puede generar perder la libertad o la vida, como lo es el sabotaje y las liberaciones ilegales de animales. Pero innegablemente las muestras de cariño a través de la propaganda nos alegran profundamente, haciéndonos sonreír con tranquilidad ante el escenario que significa que otros compañeros representen la herencia práctica, de quienes no solo queremos liberación animal; sino que la queremos y buscaremos sin consideración con quien se ponga por delante. Entendiendo que es una urgencia y que no hay razón válida para posponerla ni relativizar su necesidad imperante.
Nosotros como antiespecistas desde el minuto que pisamos estos suelos podridos, prometimos llevar adelante cueste lo que cueste nuestra postura antiautoritaria de mantener una dieta vegana. Aún cuando eso implicara comprometer nuestra integridad física. Ya que es un compromiso de vida político, que entendemos más necesario que nunca llevar adelante; cuando la cárcel la entendimos inmediatamente como una trinchera de ideas y posiciones. Jamás fuimos veganos por salud o por sentirnos bien con nosotros mismos. Sino, que decidimos el veganismo hace ya años, porque en la acción y decisión de negar todo constructo de autoridad nos pareció absolutamente aberrante e incompatible consumir por gusto: sangre, sudor, explotación, alaridos y dolor, de seres que no tienen ni una absoluta posibilidad de defenderse.
Donde la maquinaría de la industria de explotación animal, funciona igual como fueron los campos de concentración de Aushwitz o Dachau en la Alemania nazi. Y hasta con peores escenas y prácticas que estos mismos afamados centros de tortura y exterminio. Por ende, entendemos como cierto actualmente; que no se puede luchar contra la autoridad y al mismo tiempo beneficiarte de los productos salidos de esos infiernos terrenales y entendemos, como un principio inexorable ser antiespecistas y consigo obviamente veganos radicales. Ahora la otra cara de la moneda, es quienes sí son veganos por moda o por alivianar su culpa de llevar una vida pasiva y entregada a la paz social. Y honestamente, entendemos el veganismo como un conflicto ferviente y necesariamente violento contra el orden establecido. Por lo cual, para nosotros el veganismo sin acción es una contradicción en sí misma. Como la acción antiautoritaria sin veganismo también.
En estos 22 meses, hemos recorrido los más profundos recovecos de la decadencia humana. Donde el sujeto apartado de la senda socializable y legal, es consumido por las drogas y las consecuencias que trae consigo; a medida que porfundiza su navegación en este mundo tan hostil que significa las vivencias intracarcelarias. Personas que tienen un valor refractario inconmensurable, que entienden la sumision ante un sistema opresor y lo que significa, hasta muchas veces más que algunxs supuestxs compañerxs, personas que han entregado su vida muchas veces a buscar de manera subversiva, una vida que no se les asigno, gente con un potencial negador y subversivo enorme. Y muchos de ellxs, la mayoría, se desintegran en la ameba del consumo ocasional de drogas que lentamente y sin aviso evoluciona a un consumo sostenido y descontrolado. Mezclado con todos los males psicológicos y espirituales que trae consigo una larga temporada en estos oscuros parajes de encierro y privación.
Por lo mismo, es que en estos meses hemos abrazado la idea de un cuerpo y mente saludables y activos. Porque con ellos, logramos ver y sentir con mayor claridad y entendimiento cada aprendizaje que nos deja esta vivencia tan hostil y límite. Extrapolandolo constantemente a las vivencias de la vida que llevábamos en la calle. Que año a año, nos ha enrrostrado con mayor opulencia, como el consumo supuestamente ocasional y balanceado se ha llevado a tantos compañeros que prometían entregar la vida por la causa y los a transformado en apáticos clones de lo que ellos mismos prometían destruir. Carcomiendo nuestros espacios y nuestra contracultura que tanta guerra prometió dar en su momento. Haciéndonos ver actualmente, como un movimiento carente de contenido y proyección, donde los más jóvenes de nuestros guerreros son más atraídos hoy en día a la cultura del narco, que a la contraposición de ideas y prácticas contra una vida de sumisión e inconsciencia.
Y con todo eso en la palestra, mezclado con que entendemos la guerra contra la existencia como una necesidad de buscar una senda de dignidad y actitud combativa. Donde no cabe regalar ni un milímetro de nuestra fortaleza y tesón bélico; es que reafirmamos nuestra postura straight edge con absoluta certeza y seguridad. Y buscaremos bajo todos los medios el intentar propagarlo entre las generaciones venideras. La disciplina, la fortaleza, el entrenamiento, la preparación en general. Porque cuando hablamos de guerra, no es poesía bien decorada. Es guerra. Y eso implica muerte, dolor y entrega. Y a medias tintas y con la lucidez alterada, nuestra lucha siempre será una lucha condenada al fracaso y las derrotas.
A dos años de ese calor que muy pocos entienden, porque muy pocos practican lamentablemente. Es que nos enteramos que un compañero de los nuestros. Un anárquico antiespecista; Risueño. Perdía su vida en el combate callejero, en esta última romería en conmemoración por los caídos del golpe cívico militar de 1973. Arrebatado de sus seres queridos por un bastardo fascista, que le robó sus días venideros en la flor de su vida. Donde apagó la luz, de uno de esos pocos que se sencibilizan con el dolor y el sufrimiento de otras especies. Más que nunca la consigna tiene que ser: nos tocan a unx nos tocan a todxs. Sea en la calle o sea en la cárcel. No olvidaremos tu memoria y siempre serás razón de combate y honor. Sabemos que tu energía actualmente fluye por montes y ríos. Y tu mirada brillará por siempre en el fuego de nuestras negaciones. Risueño, presente. ¡Ahora y siempre!
Ya cerrando este texto, comunicamos que estamos a la espera el próximo mes, de noticias judiciales sobre la situación particular de Tortuga y Rucio. Las cuales estaremos actualizando.
Hacemos un llamado a toda muestra de apoyo y solidaridad. Sea con acciones, reivindicaciones, cartas y difusión. Como también aportes monetarios para poder seguir financiando abogados, encomiendas y peritajes que vayan haciendo falta en todo este proceso. Lo cual agradecemos de antemano y mandamos un caluroso abrazo a todos quienes han organizado y participado en instancias para recaudar fondos y difundir nuestra idea a lo largo de todo el orbe.
Guerra a la existencia, no como moda, sino como decisión de vida. Liberación animal humana y no humana, cueste lo que cueste. Ai ferri corti.
Libertad a Aldo, Lucas, Syde y Javo.
Libertad a Gerardo, Leftraru, Jordano, Chemi y Sergio Olivares.
Libertad a Francisco Solar, Mónica Caballero, Juan Aliste y Marcelo Villarroel.
Y a todxs lxs presxs en guerra del mundo.
Belén Navarrete, presente.
Luciano Pitronello, presente.
Tortuga, Panda, Rucio. Presos anarco nihilistas vegan straight edge, caso susaron. C.D.P. Santiago 1. Cárcel de cumplimiento Colina 1. Septiembre, 2024.