(Francia) Motte-Servolex (Savoie): Otra torre eléctrica derribada

En la noche del 25 al 26 de junio, serramos las patas de una torre eléctrica de 225 kV en los alrededores de La Motte-Servolex, en las afueras de Chambery.

Hemos seguido el protocolo descrito en la Adjudicación del sabotaje de un pilón eléctrico, que reproducimos a continuación:

  • 1) Serrar las barras transversales. Nota: se trata de las barras que unen las patas entre sí.
  • 2) Serrar con cortes oblicuos las dos patas en el sentido de la caída. Nota: El pilón debe caer perpendicular a los cables.
  • 3) Sierra con cortes rectos en las mismas dos patas unos 30 cm por encima de los cortes anteriores. Nota: Serrar hasta el final para tener una pieza totalmente desmontable.
  • 4) Golpear con un ariete las piezas aserradas aún sujetas por la gravedad del pilón. Nota: se puede utilizar un pequeño tronco de árbol
  • 5) Mientras cae el pilón, aléjese con pequeños pasos en dirección contraria. Nota: para realizar esta acción bastan sierras de arco y aceite.

Algunos comentarios más:

No hay que precipitarse: si has elegido bien el sitio, tienes toda la noche por delante. Cuanto más limpios sean los cortes, más fácil será trabajar con el pilón. Cuenta con una, dos o tres horas, dependiendo del pilón y de cuántos seáis. Y una docena de hojas de sierra (¡no todas las calidades y tamaños de dientes son iguales!).

Tener a alguien que vigile los movimientos de la estructura durante los últimos golpes de sierra puede ser tranquilizador, al igual que tener lejía a mano para limpiar las zonas de trabajo antes del asalto final (el ariete).

El momento de la caída es ciertamente impresionante, pero salimos indemnes, ¡como decenas de saboteadores antes que nosotros!

Y una pequeña melodía para tararear en la cabeza, para mantener el ritmo y darte ánimos…

… Y si todos vimos, caerá

No puede seguir así

Tiene que caer, caer, caer

Mira cómo ya se está inclinando

Si viera duro, tiene que moverse

Y si vieras a mi lado

Tiene que caer, caer, caer

Y tendremos libertad

Que los ataques contra los celadores de este mundo salten como chispas, ¡y gracias a quienes nos inspiran, con sus acciones o palabras!